Mouras CampeónLa historia olvidada de Roberto José Mouras con Dodge |
Carrera Nº 4: Pergamino El domingo 22 de noviembre se disputó la cuarta fecha del torneo. Fue la 13ª Vuelta de Pergamino en el circuito de 9332,60 metros de esa ciudad, bajo la denominación de "Premio Aventín Fierros". Se disputaron dos series a 6 vueltas y la final a 20 para totalizar algo más de 186 kilómetros de carrera. El público no acompañó a la categoría como se esperaba para esta época del año, y para peor, ni asados se veían. Se destacó además, la endeblez de algunos sectores del guard rail de la carrera algo que debería mejorarse para el futuro, y que llevaría a descartar el circuito en un futuro no muy lejano. El espectáculo comenzó con demoras, debido a que previo a la largada de la primera serie se escuchó en uno de los dos pasos a nivel del circuito, el sonido de la alarma que avisa del paso del tren. Se decidió esperar el paso del mismo, pero al observarse que la demora era grande, se verificó personalmente el problema, constatándose que algún bromista había puesto una piedra grande sobre la alarma. En la primera fila de la primera serie
largaban adelante Mouras y Oscar Aventín, seguidos de De Arzave
y Suárez, y Espinosa y Nani. Los dos primeros corrieron largos
de multiplicación y gordos de nafta por lo que no pudieron
terciar en la carrera. En la segunda se ordenaban Antonio
Aventín y Satriano, De Benedictis y Atauri, y Ríos y
Occhionero en las tres primeras filas. Satriano había mostrado las cartas. Quedaba ver hasta dónde podría llegar De Benedictis, y si Mouras y los Aventín lograrían mejorar para la final. Si bien este circuito era algo más extenso que el de Necochea, igual que en la carrera anterior había que tener en cuenta dos aspectos importantes: contar con muy buena salida desde abajo, y que, a partir de la tercera o cuarta vuelta, los de adelante alcanzarían a los del fondo del pelotón. De acuerdo a los tiempos de las series, la final se largó en el siguiente orden: Satriano y De Benedictis, Espinosa y Tony Aventín, Suárez y Atauri, Salgado y Occhionero, Sasso y Mouras. Pintaba lindo. Fue un carrerón. Desde la largada misma de la carrera, el ritmo fue intenso. Satriano le ganó el pique De Benedictis, pero el del Dodge verde no aflojó de modo de evitar que el Chevrolet se escapase. En la fila siguiente, Antonio Aventín y Espinosa pelearon la posición en el camino ya desde la primera curva y durante varias vueltas. Como los dos de adelante se escaparon en los tiempos, estos pelearon el tercer puesto por tiempos también. Cada fila, era un duelo. Suárez y Atauri pelearon en pista tanto o más que los anteriores. Detrás Salgado se había desprendido de Occhionero (debió reparar en boxes) y Mouras si bien debió luchar con su compañero de fila, siempre lo trajo detrás a Osvaldo Sasso, que tal vez fuera quien mejor entendió la ventaja de "tirar juntos". Al cumplirse la primera vuelta ganaba
Satriano a De Benedictis, Espinosa, "Tony", Atauri, los
Suárez y luego estaban Mouras, Salgado, Martínez Boero,
Sasso, Caparello, Pacchialat, O.Aventín, Doumic, De Arzave,
Ríos, Grosso y Brescia. Cuando los punteros alcanzaron a los rezagados, Satriano que venía siempre adelante en el camino pudo elegir el mejor lugar y momento para la superación de los mismos, de modo de complicarle la persecución a De Benedictis. El de Necochea perdía terreno entonces y a fuerza de bloqueadas y derrapes, recuperaba el tiempo perdido y se ponía nuevamente a la cola o a la par del auto de Chivilcoy. El ritmo violento de la carrera fue
castigando a los vehículos. Oscar Aventín abandonó
en la segunda vuelta con el cigüeñal de su motor roto.
En la siguiente lo hizo Martínez Boero. Desde la sexta vuelta,
el motor de "Tony" Aventín comenzó a perder
levemente rendimiento. No sería Roberto Mouras se despistó
en el transcurso de la séptima vuelta y debió abandonar
por primera vez luego de haber acaparado varios podios consecutivos.
Los Suárez se recuperaban y ascendían al cuarto lugar. En la décima vuelta el que se cayó fue Atauri cuando era quinto. Luego abandonó Espinosa, dejándole el tercer lugar a Suárez. Detrás quedaron Tony, Sasso y De Arzave. También Salgado sucumbía. Los únicos que seguían a fondo, eran los dos punteros. Satriano parecía tener algo más, pero en realidad se pensaba que era así, porque su estilo era más depurado que el del necochense, piloto de ir jugado en cada curva. Pero los dos venían dejando el resto. Viajaron varias vueltas chupados, con Satriano siempre adelante o bien a la par cuando De Benedictis sacaba el auto para intentar el sobrepaso o bien refrigerarlo. En la vuelta 16, finalmente, el del Dodge logró pasar al frente. Aprovechó la succión de un rezagado para entrar en la penúltima recta y sobre el final de la misma superó por el sector interno a Satriano. Pero este le había dejado el hueco y se había tomado todo su tiempo para doblar prolijo y salir bien pisado a la recta siguiente y así volver a la punta en el camino y la general. En la vuelta 17 en la recta que lleva a la última curva, De Benedictis volvió a poner su auto por el sector interno. Viajaron varios cientos de metros a la par sin aflojar ninguno. Cuando llegó la curva, ambos estiraron la frenada. El Dodge sólo llevaba media trompa de ventaja. Pero el motor Chevrolet explota allí mismo y no puede evitar seguir de largo. Según su piloto había perdido unas 300 r.p.m. desde unas vueltas antes. Otra vez Satriano abandonaba la carrera cuando marchaba en la punta de la misma. Como contrapartida, en esta carrera cortaba la racha de abandonos, aunque llegaría a dos vueltas, Juan Occhionero. Esa tarde Johnny, el pibe ídolo, tenía una cita con la gloria y no la quería dejar pasar. Sin Satriano en pista, sabía que sólo quedaba administrar su ventaja de más de 40 segundos sobre Hermanos Suárez, que a su vez estaba más que cómodos con otros 30 sobre el regular Osvaldo Sasso. No habrá cambios en los primeros puestos. Juan De Benedictis logra así su primer triunfo en el Turismo Carretera. Lo escoltan los Hermanos Suárez contando con tapa y múltiple de Wilke y Pederzoli, carburador de Berdejo y leva nueva, armada por el "Toto" Sotro. Llega tercero Osvaldo Sasso, cuarto Antonio Aventín a pesar de la merma de rendimiento, y como siempre, cumple con todo el recorrido de la carrera (cerrando el lote de los que lo hicieron) el llegador Ricardo De Arzave. Completaron los 10 primeros Carlos Nani que venía peleando el tercer puesto y se quedó en la última vuelta, Jorge Reynoso, Mario Di Nezio (nuevamente entre los diez), Héctor Ríos y Gustavo Brescia. Todos con una vuelta menos que el ganador. El campeonato quedó de la siguiente manera: Mouras primero con 65,50 puntos, Martínez Boero con 52,50, De Benedictis con 49, y Antonio Aventín con 43. Estos serían quienes contarían con chances de ganar el torneo en la última fecha. |