Mouras Campeón

La historia olvidada de Roberto José Mouras con Dodge

A las dos semanas, en el primer fin de semana de Julio, la cita sería en el otro autódromo que pasaría a ser ícono de la categoría: 9 de Julio. Dos series a 8 vueltas y final a veinte al circuito de 4.619 metros, para totalizar 92,380 kilómetros. Una final bastante más corta que la de Buenos Aires.

En la primera serie, Castellano tomó la punta y la administró con inteligencia para ganar por algo menos de un segundo sobre Traverso. Luego llegaron Pellegrini, Martínez Boero y Ayerza Garré que retornaba a los primeros planos con la cupé de Supertap que ahora pasaba a ser azul y roja.

Mouras volvió a ganar una segunda serie que volvió a ser bastante más lenta que la anterior. Superó a Antonio Aventín, Carlos Nani, Luis Hernández y Jorge Polanco. Emilio Satriano sólo dio dos vueltas, y largaría más allá del puesto 25 en la final. Mouras por su tiempo lo haría desde el quinto lugar de partida.

En la final no pudo largar el Ford de Traverso. El motivo se conocería al revisar más tarde el auto, ya en el taller de Pacheco: Una falla de material en los botadores. Tras la largada, Pellegrini se metió por el lado interno al llegar a la horquilla. Fue a la chapa con Castellano y tomó la punta, al tiempo que yendo por afuera, se pasaba el Gaucho Martínez Boero. Detrás de los punteros, Mouras se metía en el tercer lugar. Emilio Satriano era la sorpresa de los primeros giros. Al pasar por la primera vuelta había superado a más de 20 autos y se metía entre los punteros.

Luego de la segunda vuelta, Pellegrini comenzó a tener problemas con su auto yéndose de cola, lo cual fue aprovechado por Castellano para superarlo al salir de la segunda curva plana (recordar que se corría en el sentido antihorario, contrario al actual) y comenzar su escapada en la punta de la carrera.

Satriano en su remontada, pasó a todos los autos, con excepción del puntero, para quedar segundo, aunque no pudo alejarse de Mouras. Pero Roberto lo superó posteriormente e hizo diferencias con el del Chevrolet, que le permitieron asegurar el puesto.

Castellano logró así su segundo éxito en la categoría, primero en un autódromo y cortó la seguidilla de los dos punteros del torneo. Mouras recuperó nuevamente la tranquilidad en el campeonato, al estirar su ventaja en el mismo. Satriano, recobró la confiabilidad. Y Martínez Boero que fue cuarto penando con su amortiguador trasero derecho, seguía llegando y sumando.

Tres imágener de la carrera. En la primera, del Museo Mouras, un contorno del auto, con el piloto saludando a la mucha gente que lo hizo sentir local en el autódromo de la ciudad vecina a Carlos Casares. Se observa una publicidad nueva en el lateral posterior, que no se distingue. En las otras dos, la primera del Museo, y la segunda de El Gráfico, se ve la lucha por el segundo puesto de la carrera. Mouras por adentro trata de adelantar a Satriano y detrás de ellos viene Antonio Aventín. La última, podría parecer tomada segundos después cuando deben doblar en la horquilla del circuito, que por entonces, dado el sentido de giro utilizado, era la primera curva. Las fotos 1 y 3 no se ven en un tamaño mayor.